La moda deportiva está viviendo su particular período de gracia en los últimos años. No es de extrañar si tenemos en cuenta que la práctica deportiva y el ejercicio fitness se han disparado en los últimos meses. Ya sea al aire libre, en gimnasios o instalaciones deportivas, en grupos o de forma autodidacta con ayuda de una app o de vídeos de YouTube. El interés por el deporte y la actividad física está de moda. Y con él la ropa y las tendencias en estilo deportivo que han traspasado las fronteras estrictas del ejercicio físico para estar presentes en casi todas las facetas de nuestro día a día.
Moda deportiva más allá del deporte
La presencia (y la influencia) de la ropa deportiva en la moda masculina no es un fenómeno nuevo, ni mucho menos. Desde algunos creadores de alta costura buscando inspiración entre sudaderas y chándals hasta el uso desacomplejado de paravientos, mallas o zapatillas nike running para hombre para ir a comprar el pan. Es fácil ver como la ropa deportiva nos rodea a poco que pongamos atención en la calle. Y como su uso se ha diversificado hasta llegar a estar presente en casi cualquier acto. Y la mejor prueba de la total aceptación de esto último es que a nadie (o a casi nadie) se le hace raro ver a hombres y mujeres vestidos con atuendos deportivos sin perder ni un ápice de estilo.
El triunfo de la comodidad
No podemos reducir a un solo motivo el hecho de la que la moda deportiva se haya popularizado de forma notable en los últimos años. Pero, aunque ya lo hemos mencionado antes, el interés por el ejercicio y el bienestar físico, tampoco podemos obviar la gran baza de este tipo de ropa: su comodidad. Las prendas para hacer deporte destacan por encima de todo por ser increíblemente confortables. Si a esto le sumamos su gran resistencia (tengamos en cuenta que se trata de piezas técnicas preparadas para ser sometidas a un uso muy intenso), ya tendríamos dos claves que expliquen la popularización de la moda deportiva. La tercera y no por ello menos importante es el estilo. La moda deportiva puede ser bonita e, incluso, elegante. Fácil de combinar con otras prendas casual y con una variedad de patrones, tejidos, colores y diseños inabarcable. Todo un mundo para elegir.
Moda deportiva para todos
Otra de las ventajas de la ropa de estilo deportivo junto con su gran versatilidad es que es perfecta para cualquier persona. Independientemente de géneros, edades o tipos de cuerpos. Hay tantísima variedad que es prácticamente imposible no encontrar una prenda que se ajuste a tu necesidad y a tu bolsillo. Esto convierte a la ropa para hacer deporte en un activo imprescindible en al armario de cualquier persona. Unas prendas que siempre estarán disponibles para brindarte un look atractivo, moderno y rejuvenecedor. Y sin dejarte la tarjeta de crédito temblando.
Cuando el deporte lo invade todo
¿Cuál es el límite para usar la moda deportiva en nuestro día a día? Muchos contestan a esta pregunta con largas parrafadas basadas en el estilo y el protocolo. A veces con ideas que llevan décadas pululando por la sociedad y cuyo fundamento se pierde en el inicio de los tiempos. Lo mejor, como siempre, es recurrir el sentido común. Desde hacer gestiones en el banco hasta ir de boda (si así lo desean los novios, claro). Por suerte, pocos límites quedan ya a la hora de vestir y lo que podía ser impensable hace unos años hoy ni siquiera llama la atención. Como ir con camisetas de fútbol a trabajar un lunes después del partidazo que hizo nuestro equipo el domingo. Si las combinas con unos tejanos o unos chinos no solo no llamarás la atención sino que puede que te veas enormemente favorecido.